Guía para visitar el Monumento a la Bandera

Caminando con la Historia 


Por Miguel Carrillo Bascary


Un nuevo “día de la Bandera” parece propicio para concretar una visita al Monumento Histórico que recuerda la creación de nuestra Enseña patria. Desde este Programa les brindamos esta guía.


El Monumento Histórico Nacional a la Bandera, recuerda la creación de la Enseña nacional, ocurrida en  1812 cuando Rosario era un pequeño poblado de unos 600 habitantes la mayor parte dedicados a la ganadería y al comercio en pequeña escala. La urbanización era mínima, solo contaba con unas dieciocho manzanas que delineaban calles mal trazadas en la encrucijada del Camino Real que nacía en Bs. Aires y que al llegar a Rosario se subdividía con rumbo al Alto Perú pasando por Córdoba y hacia Asunción, atravesando Santa Fe. El centro de esta incipiente población era la hoy plaza “25 de Mayo” y la capilla de adobe donde se veneraba la imagen de Nuestra Señora del Rosario.

Por los fondos, la barranca sobre el río Paraná tenía gran altura; pero a fines del siglo XIX tomó su forma actual, cuando se abrieron las calles que circundan al Monumento. Por la proliferación de los árboles “palo borrachos”, también llamados ceibas, el paraje recibía el nombre de “Barranca de las ceibas”, este fue el lugar que se eligió para construir una batería de artillería que debía cerrar la navegación aguas arriba, en complemento con un emplazamiento similar colocado en la isla.


Con este motivo fue enviado Belgrano a Rosario, a la que llegó el caluroso día 7 de febrero de 1812, al frente de una agotada tropa compuesta por el Regimiento 5 de Infantería que cubrió los más de trescientos kilómetros desde sus cuarteles en Bs. Aires. En las siguientes semanas dirigiría frenéticos trabajos para construir esas fortificaciones, contando con la ayuda de la población que debió hacerse cargo de alimentar a sus hombres. No ha sido posible definir su número pero se aventura que eran casi tantos como los habitantes del pueblo, lo que da una idea dela magnitud del esfuerzo de los rosarinos.

Fue Belgrano quién manifestó los anhelos de los patriotas de entonces, cuando llamó “Independencia”  a la batería que se emplazó sobre la isla; la otra, situada aproximadamente donde está el Monumento, se denominó “Libertad”. Allí, el 27 de febrero de 1812 se enarboló por primera vez la Bandera nacional. Ese día histórico señalaría el protagonismo de Rosario en la gesta belgraniana hasta el punto en que hoy se la denomina “cuna de la Bandera”.

Desde 1872 el pueblo de Rosario intentó erigir un monumento a la Bandera en recuerdo del mago hecho de su pasado. Distintos proyectos naufragaron por diversos motivos, pero los rosarinos no cejaron en su empeño. Recién en 1940 un concurso de anteproyectos permitió seleccionar el presentado por los arquitectos Angel Guido, Alejandro Bustillo y los escultores Alfredo Bigatti y José Fioravanti. Se pensó que la obra finalizaría en dos años pero fueron muchos más. 

El Monumento se inauguró recién el 20 de junio de 1957, día de la Bandera, en el marco de una grandiosa fiesta popular que reunió unas quinientas mil personas y concitó la presencia de las autoridades nacionales y de numerosas provincias.

En su conjunto el Monumento representa la gran nave de la Patria que se desplaza por el mar de la Eternidad y que contiene al pueblo argentino. Guido lo pensó para ser recorrido por los visitantes y como un amplio espacio para manifestaciones populares. Posee un estilo “monumental”, acorde a la tendencia de estilo que imperaba en la época; si bien contiene reminiscencias neo clásicas, también incorpora elementos americanistas, como la pirámide escalonada que conforma uno de sus segmentos. La estructura de hormigón y ladrillo está recubierta de mármol travertino extraído de la precordillera de los Andes. Cada uno de sus sectores y todas sus esculturas tienen un riquísimo significado cuyo desarrollo excede del espacio de esta guía.

Hay diversas formas de recorrerlo; desde esta colaboraciones planteamos seguir un orden lógico que permitirá apreciar sus particularidades, ya que abarca más de 13.000 metros cuadrados.

Puede solicitarse una visita guiada (gratuita), ingresando desde calle Santa Fe 581; al gran recinto que se domina “Galería de Honor de las Banderas de América”, evidencia la unidad americana a través de las banderas, escudos, himnos y las flores nacionales de cada estado del continente. Se suman los de España y de Italia, países que aportaron la mayor cantidad de inmigrantes al poblamiento de Argentina. Son de interés las maquetas de los diferentes anteproyectos del Monumento. En la vitrina central destacan los símbolos argentinos, una réplica del sable del general Belgrano y la bandera que ondeó en la Casa de la Gobernación de Malvinas, en 1982. A su derecha se proyecta, en continuado, un video explicativo. También pueden verse varias enseñas históricas. Ocasionalmente se exhiben muestras transitorias de diversa temática. Por detrás de la vitrina consagrada a la Argentina está la “Sala Antártida” que presenta diversos paneles didácticos que testimonian los derechos de nuestro país en el área austral, aunque de momento se encuentra inhabilitado por las tareas de restauración en curso. Una tienda de recuerdos ofrece productos al alcance de una amplia variedad de presupuestos.


Al salir, proponemos continuar por calle Santa Fe, por unos cuarenta metros, lo que permitirá apreciar varios grupos escultóricos destinados a formar parte de un monumento que a comienzos del siglo XX encaró la plástica Lola Mora  y que finalmente quedó trunco. Giramos hacia la izquierda y pasamos por debajo de un puente que conforma el pasaje “Juramento”, que enlaza el centro histórico del primigenio poblado, la hoy plaza “25 de Mayo”, la iglesia Catedral; el Palacio Municipal y el Monumento a la Bandera, prolongándose hasta el río Paraná; conformando un eje histórico significativo. El Pasaje se inauguró en 1989.

Por medio de una gran rampa paralela a calle Córdoba, subimos hasta una gran explanada que anticipa al Propileo, verdadero pórtico del Monumento, cuyo aspecto general nos remite al Partenón. Representa a la Nación organizada por su Constitución, una vez culminado el proceso histórico de su formación. Lo coronan varios versos del Himno nacional. El Propileo alberga un gran espacio que ofrece una espectacular vista hacia el interior del Monumento y en su centro contiene la “Llama de la Argentinidad”; permanentemente encendida; nos recuerda a los soldados que ofrendaron su vida por la Patria en las luchas por la Emancipación. 

Hacia nuestra izquierda tenemos un balcón con vista privilegiada sobre el parque nacional a la Bandera; allí también, en sendas hornacinas se emplazan las alegorías de la “América Indígena” y de la “América Colonial”; diseñadas por Angel Guido, que aluden a las diversas etapas en la historia de nuestro continente. Sobre el balcón simétrico, en el sector opuesto del espacio se encuentran las estatuas que representan a la “América Constitucional” y a la “América Futura”.

Hacia el frente del Propileo accedemos a la Escalinata o Patio Cívico que desciende hasta el pie de la Torre, con el imponente marco del río Paraná al fondo. En este espacio se ubica el público que concurre a las representaciones artísticas; cívicas y de otros caracteres.


La gran Torre alude a la Revolución de Mayo que inició la Emancipación, rompiendo los lazos con el poder colonial. Descendiendo por la Escalinata, crece en perspectiva el Atrio, donde destaca el gigantesco bronce de “La Patria de la Fraternidad y el Amor”, figura matricia que parece recibir a sus hijas, las catorce provincias que en 1853 suscribieron la Constitución nacional, representadas por sus escudos. En los contrafuertes. siguiendo el orden protocolar se observa izadas a la Bandera Nacional; la de Santa Fe y la de la Municipalidad de Rosario; en el segundo mástil central ondean las enseñas de otras naciones, los días de sus respectivas fechas patrias.


Llevando la mirada a lo largo de la Torre se percibe con claridad el paño de bandera que se forma, con el Sol incaico en su centro. Rodeando a la estructura y a gran altura se emplazan varios colosos alegorías de los cuatro puntos cardinales. Próximos al interior hallamos un notable bajorrelieve: el “Juramento de la Bandera en Jujuy”. 

Ingresamos a la Torre por el portal de “La Gloria” y llegamos a la “Cripta de Belgrano”, donde una estatua del Prócer y la presencia de la Cruz enmarcan el lugar preciso en que presumiblemente si izó nuestra Bandera por primera vez, el 27 de febrero de 1812. También allí se exhibe la piedra fundamental del Monumento, colocada en 1898 y una placa que recuerda la misa que rezó el santo papa Juan Pablo II, cuando visitó la ciudad en 1987.


Desde la Cripta puede subirse al Mirador ubicado a 69 metros de altura, para apreciar espectaculares vistas de la ciudad, del puerto y del río Paraná con sus islas. Para ello hay que adquirir un ticket en Boletería; subir un tramo de escaleras y tomar el ascensor. Cuatro balcones permiten observar el panorama; dos potentes telescopios facilitan gozar de lejanos detalles. Lo indicado es que al salir del ascensor circulemos hacia la derecha para comodidad de todos los visitantes. 


Completado el descenso salimos hacia la izquierda para volver al Atrio; allí vemos otro bajo bajorrelieve evocativo llamado “Creación de la Bandera”.


Continuando hacia la derecha se desciende por otra escalinata que lleva hasta la calle en dirección al río. En el trayecto vemos el alto relieve “Las damas mendocinas bordan la Bandera de los Andes”; también una magnífica escultura en bronce que representa a la cordillera de “Los Andes” y el coloso marmóreo del “Océano Atlántico”.


Una amplia plazoleta que se extiende hasta el Mástil Mayor permite apreciar al Monumento desde diversos ángulos; consta de unos cuarenta metros, hacia el Sur se encuentran dos antiguos obuses de mediados del siglo XX que remiten a la batería “Libertad”.

Observando al Monumento destaca la imponente magnitud en forma de proa de la imaginaria nave que abre las aguas en su marcha. Sobre la misma se yergue “La Patria Abanderada”, mujer con evidentes rasgos gauchos, porta una tacuara con la Enseña nacional. Algo más atrás, la “Cruz de la Cristiandad” alude a la fe del Creador de la Bandera. Significativas palabras del Prócer contornean la base de la Torre, invitándonos a comprometernos con su legado. Yendo hacia la izquierda se encuentra la alegoría del Río Paraná; el alto relieve “Juramento de la Bandera de los Andes” y otro bronce alusivo a “La Pampa”.


El gran porte del Monumento demanda una mejor perspectiva, para ello hay que cruzar la avenida Belgrano (por la senda peatonal marcada) y observarlo desde el pasaje “Batería Libertad”, sector de pórfido rojizo que se extiende hasta casi tocar las aguas del río. En su comienzo hay un pequeño bosque de ceibos, nuestra flor nacional. A su vera están emplazados dos cañones históricos, similares a los usados en la Batería donde por primera vez se izó nuestra Bandera.

Ya sobre el gran Parque Nacional a la Bandera, no puede dejar de recorrerse el “memorial de los héroes que viven en Malvinas”, que conmemora a los 649 argentinos que ofrendaron sus vidas durante la gesta de 1982.

Para terminar, no debemos dejar de mencionar que la visión nocturna con el Monumento iluminado y sus fuentes nos aporta una dimensión cromática que resulta verdaderamente inolvidable.


Notas: 
- El exterior del Monumento puede recorrerse a cualquier hora del día, durante todo el año. La "Galería de las Banderas"; la "Cripta" y el "Mirador" cierran en contadas oportunidades. Puede consultarse sobre horarios en la web: https://www.monumentoalabandera.gob.ar donde se encontrará mucha más información.
- El espacio verde que rodea al Monumento se presta excepcionalmente para pasar un día de sol con la familia en en mismo existe variada oferta gastronómica fundamentalmente centrada en las instalaciones de la "Estación Fluvial", a la vera del río; pero también hay otros espacios en su perímetro.
- Continuando por avenida Belgrano, rumbo al Norte a unos ciento cincuenta metros del Monumento se halla la oficina de Turismo de la ciudad, en donde el visitante puede recabar información sobre otros atractivos y actividades.
- En el interior del Monumento existe un destacamento de la Gendarmería Nacional que aporta seguridad a los visitantes.
- Puede participarse de los izamientos (8,15 hs.) y arríos de la Bandera en el Mástil Mayor 
- Es factible realizar un tour virtual desde: https://www.monumentoalabandera.gob.ar/page/recorrido
- Lamentablemente el Monumento fue construido en tiempos donde no existía la sensibilidad actual hacia las personas con discapacidades motrices, por lo que el diseño implica barreras arquitectónicas que solo permite acceder con cierta comodidad a la Galería de Honor; al Pasaje Juramento y al Propileo.
- Hay amplios baños públicos sobre avenida Belgrano en su esquina con las escaleras de ladrillo que vinculan el sector con la calle Santa Fe.




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