Emblemas de los pueblos originarios

Emblemas de los pueblos originarios

(adhesión a la semana que los destaca)


Por Miguel Carrillo Bascary



Banderas de algunos pueblos indígenas argentinos y la Wiphala (Ver nota al pie)


Como parte del proceso de visibilización de estos pueblos en los últimos años muchos han adoptado banderas que los identifican.

Subjetivamente pueden gustar; técnicamente algunos presentan objeciones a su diseño; pero es necesario comprender que si fueron elegidos fue por propia decisión, lo que no puede discutirse.

Los colores y formas que incorporan responden a sus respectivas culturas.
La diversidad que puede verse en la imagen demuestra y ejemplifica lo expuesto. Para lograrla tomamos algunas de las decenas de bandera que hoy están en uso.


No existe una bandera que los aglutine

Cada uno de estos pueblos posee una identidad que los particulariza del conjunto.
Es factible que en el futuro todos ellos definan alguna bandera que los represente, a la manera en que la enseña de las Naciones Unidas, lo hace con la mayoría de los estados del mundo.

Hasta el momento esto no ha ocurrido, de manera que puede afirmarse que no existe ninguna bandera que simbolice a todos los pueblos originarios.
Sin embargo, se ha difundido la idea de que la Wiphala, de origen aymara es “la bandera de los pueblos originarios”. Nada más lejos de la verdad.

En primer lugar, la Wiphala es un símbolo cultural, no una bandera propiamente dicha, posee una impronta cultural precisa.

En segundo, hay que precisar que la Wiphala, ha alcanzado gran difusión a consecuencia de diversos procesos ideológicos; etno-centristas y otros factores (incluso el marketing de la new age). A los ojos de la opinión pública, esto le atribuye una representatividad que no tiene, simplemente porque el conjunto de los pueblos originarios no se la ha dado.
Un tercer aspecto radica en que la Wiphala está considerada por algunos como la bandera del Tiwantinsuyo (Imperio Inca), el estado de cuatro naciones unidades (“Tawa suyo”, en aymara). Esto permitiría que las diferentes etnias que estuvieron comprendidas por ese gran sistema político americano; pudieran reconocerla como emblema de unidad, pero (se reitera) esto aún no ha ocurrido.

Además, es preciso reconocer que esa referencia excluye a todos los pueblos que nunca pertenecieron al Incanato; más aún hubo muchos que por varios siglos resistieron con las armas ser sojuzgados por los descendientes de Manco Cápac y sucesores. Es el caso de la “gente de la tierra” a quienes se conoce como mapuches” o “araucanos”; su lucha secular contra el Incario avalan que jamás acepten identificarse con la Wiphala, como ya lo han manifestado sus referentes en sin número de oportunidades.


No existe una única Wiphala

Todo lo contrario, en la siguiente imagen se demuestra la enorme variedad que posee, aunque vale reconocer que la más difundida es aquella de lados iguales, cuya banda central es de color blanco, originariamente representativa de la región  sur del imperio que abarcaba el Altiplano boliviano, el Norte de Argentina y Chile; junto al extremo del Perú (“Qulla suyo”, en aymara)



Una última observación

La Constitución Nacional argentina en su reforma de 1994 alude a estas etnias como “pueblos indígenas argentinos” (artículo 75, inciso 17) y les garantiza su identidad; este marco jurídico avala que por propia decisión y sin que medie necesariamente ningún reconocimiento oficial, adopten las banderas que libremente determinen.

En consecuencia, las enseñas de estos pueblos pueden ser usadas en nuestro país, con la sola condición de que se reconozca la preeminencia de la Enseña nacional y de las provinciales.


No es correcto designar a estos conjuntos con el término jurídico de “naciones”, este término se ha difundido por ser el empleado en América del Norte, que aluden a los pueblos originarios como “las primeras naciones”.


Nota: en la imagen se representan las banderas de: diaguitas; ocloyas; lules; comechingones; tastil; tehuelches; kawesqar; wichis; mocovíes; qoms; mapuches; pilagás; charrúas; avás y varios ejemplares de wiphala.

Comentarios